Hacer un trío
El trío es probablemente la fantasía sexual más extendida del mundo. Se trata de una práctica altamente morbosa y aunque durante mucho tiempo ha sido un tema tabú, empieza a ser cada vez más habitual que se hable de ella sin ningún tipo de pudor. El número de personas que practica tríos o sexo en grupo es más elevado de lo que en principio se puede pensar. Hacer un trío tiene muchas ventajas y pocos inconvenientes. Además, tener dos personas para tu entera disposición en la cama es muy tentador...
Si estás pensando en hacer un trío, conviene que tengas en cuenta una serie de consejos para que todo salga como es debido:
Antes de todo debes estar seguro de dónde te metes. ¿Te apetece realmente hacer un trío o lo haces solamente para complacer a tu pareja? Para acceder a un trío sexual, debes estar muy segur@ de que es tu deseo más que el de cualquier otra persona que te pueda haber convencido. De lo contrario la experiencia será un fracaso y puede que tus sentimientos salgan bastante perjudicados.
Si eres tú quien desea realizar el trío y tu pareja no desea hacerlo, es mejor no presionarla y respetar su decisión. Además recuerda que un trío puede causarle celos y dudas respecto a tus sentimientos hacia ella. Por eso mejor valora muy bien tu relación y su forma de ser antes de proponérselo.
Es muy importante decidir a quién se escoge como tercer participante, puesto que normalmente los otros 2 suelen ser pareja. Debe tratarse de alguien con quien no vayan a establecerse vínculos emocionales (a no ser que se quiera mantener una relación triple) y no se produzcan situaciones incómodas después, pero a la vez alguien con quien exista suficiente confianza para sentirse libre y desinhibid@ durante esta particular experiencia.
También hay que tener bastante claro qué se quiere hacer. ¿Queréis mantener una relación sexual completa o sólo jugar un poco? Habladlo tanto antes como durante la relación. La comunicación, como siempre, será muy importante. Además es esencial que los tres disfrutéis. Las otras dos personas no están a merced tuya y también deben pasarlo bien.
No olvidéis la seguridad e higiene. Es recomendable que uséis varios preservativos (uno cada vez que se cambie la pareja). Además, si utilizáis juguetes sexuales (fundas, vibradores, consoladores, bolas chinas, etc.) es recomendable limpiarlos tanto antes como después de su uso.
Por lo demás, diviértete, déjate guiar por tus deseos y disfruta libremente de la experiencia. Si todo sale bien seguro que repites.