Lencería sexy para excitar a tu pareja
La lencería íntima es un recurso muy útil como punto de partida de cualquier relación sexual. Unas braguitas, un body, un picardías, un tanga, un disfraz erótico… ¿Cuánto tiempo hace que no sorprendes a tu pareja con alguna de estas prendas? Es más, ¿alguna vez lo has hecho? Si no es así, ¡no lo aplaces más! Recuerda que lo primero es lo primero, y con ello nos referimos a cuidar de la salud de tus relaciones íntimas.
Las prendas de lencería erótica son perfectas tanto para sentirte más sexy tú mismo/a como para resultar más atractivo/a y morboso/a a ojos de tu pareja. La moda erótica femenina (o masculina, que también la hay), es perfecta para lucir en cualquier ocasión y dar un toque más atrevido, picante y divertido a tu vida sexual. Además, es dulce, sensual y una opción muy económica. Por tanto, puedes comprártela para ti mismo/a o regalársela a tu pareja cuando menos se lo espere con cualquier excusa, celebración o efeméride.
La lencería sexy, en cualquiera de sus variedades, es una buena forma de crear y cumplir todo tipo de fantasías sexuales. Un vestido de enfermera, policía, porno chacha… que levante la mano quien no haya tenido estas u otras fantasías más inconfesables. Ahora, por fin, puedes llevarlas a la realidad, y lo que es mejor, hacerlo con la confianza de tu pareja. Tampoco pierdas de vista las prendas que dejan los pechos, nalgas u otras zonas íntimas parcial o totalmente al descubierto. Con ellas, no solo mostrarás estas u otras partes erógenas, sino también tus deseos de disfrutar del sexo. Y apostamos lo que quieras a que consigues aumentar la libido de tu pareja, dando como resultado relaciones que harán temblar los cimientos de tu edificio. Eso sí, no nos responsabilizamos de las quejas de tus vecinos.